Análisis de Pokémon Espada y Escudo

Pokémon Espada y Escudo salieron al mercado el pasado 15 de noviembre. Ya hemos tenido tiempo de sobra para completar ambas versiones, y os contamos qué nos ha parecido.

Aquellos que esperaban una revolución con la llegada de Pokémon a una consola de sobremesa van a tener que esperar. Pese a sus evidentes atractivos, es innegable que Espada y Escudo son de corte tradicional.

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Como siempre, vamos a ir por partes. Os contamos los defectos y virtudes de Pokémon Espada y Escudo, dos juegos que no han dejado indiferente a (casi) nadie.

Una historia para toda la familia

Seamos sinceros: la trama de los juegos nunca ha sido la parte importante de las últimas entregas. Pokémon Espada y Escudo vuelve a apostar por una trama sencilla, en la que el juego nos lleva de la mano durante todo el viaje. Hay un par de giros bastante predecibles, y ni la historia principal ni el postgame tendrán demasiadas sorpresas.

Lo que sí ha mejorado sustancialmente (en algunos casos) son los gimnasios. Estas nuevas entregas deberían marcarle el camino a Game Freak en lo que a diseño de gimnasios se refiere. Por supuesto, no faltarán las peleas contra entrenadores antes de los líderes, pero ahora la cosa será diferente.

Las mecánicas incluidas en algunos gimnasios nos harán realizar acciones de los más variopinto, acciones que suponen un cambio realmente positivo a la clásica fórmula de puzles simplones y entrenadores por doquier.

Según la versión que juguemos, habrá cambios en los líderes de gimnasio. En Pokémon Espada, el 4º y el 6º gimnasio serán de tipo lucha y roca, respectivamente. En Escudo, el 4º y el 6º serán de tipo fantasma y hielo, respectivamente.

Poco más queda de resaltar de este apartado, en el que se notan ciertos cambios a mejor. En ciertos gimnasios, se nota que la desarrolladora japonesa está comenzando a experimentar, y es algo positivo.

Gráficos en Pokémon Espada y Escudo: luces y sombras

El apartado gráfico de estas entregas está plagado de contrastes. Por un lado, el diseño de las ciudades y algunas nuevas criaturas son geniales. Pese a no ser modelos nuevos, es innegable que las criaturas se ven realmente bien en estos juegos de Switch.

No obstante, es imposible no acusar el pop-in. Básicamente, una enorme cantidad de modelos (tanto de humanos como de Pokémon) cuentan con una distancia de dibujado (distancia a la que aparece el modelo) muy pobre. Por ello, en bastantes ocasiones no veremos los modelos desde lejos, sino que tocará acercarse.

En general, el juego suele mantenerse estable en su tasa de frames. Pero la cosa cambia para MUY mal en la Zona Salvaje. Esta zona es una de las características más importantes del juego (vamos a pasar una buena parte del post-game aquí) y no está pulida en lo más mínimo.

Sí, es genial estar paseando y ver a un Gyarados nadando o a un Steelix pululando por la zona, pero TODOS los problemas expuestos anteriormente se recrudecen en esta zona:

• El pop-in se acusa todavía más, llegando a aparecer modelos a escasos metros de nuestro personaje. Así, tocará enfrentarse a criaturas por aparecer demasiado tarde (sobre todo si son modelos grandes).
• La tasa de frames. Ya no es que el juego no aguante los 30 fps, es que se han llegado a ver parones totales de 2 segundos mientras la Switch procesa la información.
• En lugares con muchos modelos en pantalla (tanto jugadores como Pokémon) la cosa se resiente hasta límites ridículo, llegando a crashear el juego cuando la consola no puede más.

Como idea, la Zona Salvaje es fantástica. Una genialidad. Pero el pobre desempeño gráfico lastra mucho lo que debería ser una de las experiencias más bonitas de esta generación de Pokémon.

Pokédex Nacional y Dinamax

Muchos jugadores no están contentos con el hecho de que se hayan realizado recortes en la Pokédex. Sin embargo, en opinión de este redactor, no es un recorte, es una oportunidad.

Aquellos que sigan el competitivo de forma razonablemente asidua sabrán que, en las temporadas de VGC en las que ha estado permitida toda la Pokédex, siempre se han visto las mismas criaturas, una y otra vez. Este número reducido de Pokémon podría dar lugar a un metajuego algo más variado, aunque todavía está por ver.

Al parecer, llegarán más criaturas en futuras actualizaciones (¿DLCs?), por lo que la cosa mejorará en el futuro. En cuanto al Dinamax y Gigantamax, se trata de unas mecánicas interesantes que vienen a sustituir a los movimientos Z y las mega evoluciones.

El hecho de que solo duren 3 turnos lo convierte en una característica interesante, que habrá que utilizar sabiamente para sacar ventaja al oponente. Para los más despistados: la diferencia entre Dinamax y Gigamax es que CUALQUIER Pokémon puede ser Dinamax, mientras solo unos pocos tienen forma Gigamax.

Un Pokémon puede tener forma Gigamax y Dinamax, aunque si queremos tener esta última, tocará (en la mayoría de los casos), capturar en dicha forma en las incursiones.

La vertiente online y las incursiones: lo mejor de Pokémon Espada y Escudo

Antes he hablado maravillas de los gimnasios, aunque he querido dejar para el final el apartado que mejor sabor de boca me ha dejado: las incursiones. Se rumorea que el fantástico GTS pasará a formar parte de Pokémon Home. Sin embargo, el resto de características siguen disponibles.

Podremos utilizar códigos para intercambiar y luchar con nuestros amigos. Además, también podremos poner una contraseña a nuestras incursiones para que solo accedan aquellos que conozcan la clave.

Este último punto es, a mi opinión, el mejor del juego. Tras terminar la historia, el proceso para conseguir criaturas poderosas es el siguiente:

1. Realizar incursiones para conseguir criaturas poderosas.
2. Una vez tengamos un buen equipo de 6, ir a la Torre Batalla.
3. Tras conseguir puntos en dicha Torre Batalla, podremos comprar objetos. Estos objetos se utilizarán para mejorar a nuestros Pokémon.

Tras estos 3 pasos, ya deberíamos tener todas las herramientas para crear Pokémon “perfectos” (también está la crianza). Estas criaturas serán las que utilizaremos en los combates online y en los torneos del juego.

Algunos de estos pasos deben hacerse en solitario (la Torre de Batalla). Sin embargo, las incursiones se disfrutan enormemente con amigos. Estas incursiones tienen distintos rangos en base a su dificultad (de 1 a 5 estrellas), y la gran mayoría de 5 estrellas necesitarán a 3-4 personas humanas para superarse.

En cada incursión, 4 entrenadores se enfrentarán a un Pokémon Dinamax. Los huecos vacíos los ocuparán entrenadores de la IA con Pokémon aleatorios. Por ello, es importante que, en las más difíciles, busquéis ayuda si queréis triunfar, pues el proceso no será fácil.

Conclusiones

¿Son Pokémon Espada y Escudo malos juegos? No. Ni de cerca son malos juegos. Pese a que las expectativas estaban altas, podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que, como mínimo, cumplen.

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Es cierto que hay fallos inexcusables para una desarrolladora de la talla de Game Freak (véase el rendimiento gráfico en la Zona Salvaje), pero los fans de Pokémon disfrutarán, una vez más, de unos juegos que han dado un paso hacia una dirección clara.

Solo el tiempo dirá si es la dirección correcta o la errónea, pero era un cambio que la saga necesitaba. Podéis ver la página oficial de los juegos aquí.